El ser mamá trago a mi vida mil cosas nuevas, me empapo de un él y deje completamente de lado el YO, mi retoño se volvió el centro de mi vida, desplazo todo... desde mis preferencias hasta a mi orgullo, pero ¿como no hacerlo? Él es tan pequeño, tan tierno, tan bello... y sumamente indefenso. Además ¡salio de mi! ¿que puede haber mas importante?
Aunque debo admitir que esta nueva etapa de mi vida me cambio cañón... ahora mi sensibilidad se encuentra a flor de piel... y me brota de forma constante aun en contra de mi voluntad... me a vuelto defensora hasta de quien no conozco, hace me enternezca con cualquier niño pequeño que me tope en el camino y del llanto mejor ni hablar ese ingrato se a hecho ya cliente frecuente, va y viene a su antojo.
Ser mamá ¡claro que nos cambia!, porque no es lo mismo correr libre por la vida bajo un torrencial que una simplemente ve como un ligero chubasco y del cual lo peor que te puede dejar es una gripilla... a tener ahora sobre tus hombros la responsabilidad de un pequeño ser, y que una sea quien debe estar atenta a sus necesidades, ahora esa "lluviesita" se vuelve una tormenta de liquido gélido que puede tumbar a nuestro retoño en la cama con fiebre alta o hasta mandarlo al hospital... así de extremo se vuelve todo ( o quisa solo me pasa a mi).
Ser madre no sólo te cambia en tus costumbres, también te vuelve mas sensible, o por lo menos a mi también me ha pasado, no he podido volver a ver una peli triste por ejemplo, enseguida lloro.
ResponderBorrarEn fin... es lo que tiene la maternidad.
Supongo que si, esto no viene por ningun lado con ninguna guia o instrucciones y muchi menos con las contraindicaciones y efectos secundarios... o por lo menos a mi ese paquete aun no me ha llegado.
BorrarHola, supongo que me has pedid que pase para que le eche un vistazo a la imagen del blog. Es tan sencillo que no me molesta nada, aunque podrías añadirle una cabecera al blig y fotografías a los posta, para que resulte más atractivo y ameno.
ResponderBorrarUn saludo!